La amante

Llegué a las 8.30
Estacioné y toqué el timbre.
Salude a todos, le di el regalo a mi suegra, y salimos a ver el auto nuevo.
Era temprano, todavía no había llegado casi nadie, solamente la tía de Sebas, una solterona amargadisima que nunca me había caído bien. Nunca me voy a olvidar lo que me dijo:

-Ay querida, esto no es mucho auto para vos?-

No me voy a poner a analizar que habrá querido expresar con esa frase, pero puedo decir que la odié con lo mas profundo de mi ser.
Solo atiné a contestarle:
-Y no...mucho no es, porque lo tengo.-
Nadie iba a amargar mi noche menos esa vieja descascarada.-

Todo estaba saliendo bien, iba llegando la gente y nadie me prestaba mucha atención, lo que era genial ya que nadie me iba a extrañar si me iba.

A las 21.45hs, tal como habíamos quedado con Caro me suena el celular y atiendo:

-Hola? Si? Caro sos vos? que pasó?

Hablaba lo suficientemente alto como para que Sebastian me escuchara.

-Nooo! en serio? como estas? en donde estás?

Sebastian me miraba de reojo y su cara se iba transformando.

-No te preocupes, no llores, ya voy para allá!

Lo miré a Sebastian y le dije:

-Mi amor, tengo que irme ya, Caro esta en la comisaria, parece que le robaron en la calle y esta muy asustada, no la puedo dejar sola.-

-Pero Gorda, es el cumpleaños de mamá! Caro no tiene otra persona para llamar?

-Sabes que no Sebas, no me hagas esto por favor, tengo que ir a ayudarla, tu mamá va a entender, por favor explicale que es una emergencia que yo no la quiero molestar.-

-Lucila, mamá no va a entender! Tenés que estar en la foto de la familia, no te podés ir.-

-Foto de la familia??? Sebas no jodas, no pasa nada si no estoy, sino que la saquen ya.-

-La foto es después del brindis, y lo sabes.-

-Sebastian, me voy , una foto no cambia nada y mi amiga me está pidiendo ayuda. Me voy.

-Vos sabrás lo que haces.