Como lo conocí a Sebas

A Sebas lo conocí un verano.

Yo no buscaba nada, quería conocer el mundo, quería conocer gente y lo conocí a él.

Había viajado el segundo día de enero a Uruguay a la casa de mi tía con mis primas. Íbamos todos los años y nos quedábamos un mes. La pasaba genial.

Una noche de tantas que solíamos salir, nos invitaron a una fiesta en una isla, había que ir vestido de rojo.
He ido a muchas fiestas buenas en mi vida, pero esta era LA fiesta. Mucha gente, mucho alcohol, muchas ganas de pasarla bien, mucha buena onda.
Nos subimos a la lancha y partimos. A pesar de estar en la costa hacía bastante calor.

Llegamos y era un paraíso, una fiesta en la playa, con música, antorchas y una barra libre.

En un momento lo vi. Estaba con sus amigos y me miraba. Me gustó a primera vista, Sebas era realmente lindo y más bronceado.
Nosotras seguimos bailando y al rato viene con los amigos a hablarnos, nos contaron que eran argentinos, de Buenos Aires y que habían venido solo por cuatro días. La verdad que me gustaba mucho, aunque casi no hablaba.
Me dijo si no lo acompañaba a buscar algo para tomar y yo fuí. Compró un champagne, pidió dos copas y nos alejamos de la gente para charlar tranquilos.
Todo era perfecto, estaba en un lugar perfecto con el hombre perfecto y besaba perfecto.Fue una noche inolvidable, todavía hoy la recuerdo y tengo una sensación de felicidad.

La fiesta terminó al amanecer tirándonos todos al mar bailando.

Volvimos a la ciudad con promesas de volvernos a ver.

Tardó tres meses en llamarme, aunque lo recordé todo el tiempo, me hice la desentendida, como que no me acordaba quien era, no le iba a ser tan fácil, después me explicó que fue porque tenía que terminar la relación con una novia que tenía, que se había acordado de mi todo el tiempo, pero que no podía terminar con su novia así nomas ya que la familia de él y la de ella eran amigas. Supongo que esa es una de las razones por la cual nunca pude tener una relación fluida con mi suegra, ella hubiera querido que se quedara con la otra.
Yo no le pude decir que no y a la semana estábamos haciendo la presentación oficial en su casa, con reunión familiar y todo.
No hay mucho mas que contar, eramos una pareja normal, nos fue ganando la rutina, fuimos conociendo el uno del otro nuestras mejores y peores cosas, nos peleamos y nos amigamos, nos odiamos y nos amamos.

Yo no me arrepiento de haber estado con él, fue un momento de mi vida en la que aprendí muchas cosas y creo que hoy no sería quien soy si no lo hubiera conocido.La gente que va pasando por nuestra vida, mal o bien nos va moldeando y nos hace descubrirnos a nosotros mismos. Nos hace dar cuenta que queremos y que no queremos.

Tampoco me arrepiento de no estar mas con él, tuvo que estar cuando era debido y se terminó cuando debía terminarse ni mas ni menos.
Hoy no lo extraño, pero si guardo lindos recuerdos, y creo que está bien que sea así.